Inmortalidad

Inmortalidad

Julio 13, 2006 on 12:23 am | In General | No Comments

Sentado paladeando un vino con tanta antigüedad como la Biblia. En un sillón de cuero, mirando con el largo cabello cayéndole por la cabeza, pálido de los años. Miraba a la joven que atentaba contra su integridad por él.
- ¿De verdad deseas la inmortalidad?
Con un bufido como si la pregunta fuera tonta, lo miro con desprecio la muchacha, que rondaría la flor de la vida.
- Claro que deseo ser inmoral, para eso he caminado tanto, buscándote. Por eso no he dormido en tantos años, desvelada por tus acertijos. Quiero ser la máxima humana que tanto ha ansiado la raza, por siempre jamás quiero ser alguien que pueda ver las maravillas del futuro.
Desvía la mirada el hombre que sentado en la butaca, cruza los dedos y hace la pregunta que pone a prueba la cordura humana.
- Veras morir a todos y cada uno de los que conoces, a cada persona que ames ya sea amigo, novio familia, o mascota. Todos morirán, y te dolerá tanto cada vez que mueran que al final querrás morir. Tu vida se convertirá en algo pernéenme a través e los mares del tiempo. Nunca morirás, nunca tendrás sed o hambre. Vivirás eternamente contra todo pronostico, a cambio sufrirás todo, una y otra vez por toda la eternidad. Estas dispuesta a ello. Llegada a este punto es la última vez que te dejo elegir.
Asintió la cabeza.
- Para ser inmortal, tienes que dejar a un lado la familiaridad o el cariño, nada de eso importa. Así que sacrificaras todo l oque es bueno para ti por la inmoralidad.
Ella asintió. El hizo pasar a su hermana, tenia nueve años. Como si fueras una simple orden dijo, asesínala. De la forma más cruel y despiadada que puedas, lo hartas con las manos desnudas. Tú hermana a cambio de la inmortalidad que tantas ansias.

Ella con las manos desnudas, empezó a pegarle a su hermana, que lloraba desconsoladamente, pro que su modelo a seguir en la vida la agredía. De un bocado le arranco un trozo de cuello, lo paladeo y lo trago. Desangrándose con los ojitos triste de compadecimiento y terror seguía chillando. Ella incansable abrió su estomago, y empezó a comerse las tripas estando ella aun viva. Luego le vació los ojos con la lengua. Abrió su caja torácica y destrozó su corazón a mordiscos. Su alma la devoro en un sorbo.

Manando sangre todavía de su boca, exhumando la sangre de su tierna hermana, dijo ahora mi deseo.

Él simplemente abrió las ventanas de la terraza, se veía toda la ciudad, era un piso privilegiado. Vistas a la ciudad desde un décimo octavo piso. Giro la cabeza y dijo, hay la tienes camina hacia ella.

Ella caminando se paro un momento, había llegado demasiado lejos para parase, un paso y callo en una espiral de gritos y frenesí. Cuando la policía recogió el cadáver no se reconocía nada de ella.

El en su paraíso de soledad, asintió y dijo, demasiado fogosa. No hubiera tardado mucho en desvelar el secreto. Una pena tenía unos senos tan bonitos… en fin.
Moviendose cojio un volumen y se puso a contemplar las historias del pasado que el había vivido…